(12-noviembre-2021) Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico (UPR) y miembros de la Juventud del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) del Distrito de Humacao hicieron un despliegue en la PR #30 en contra del recién Plan de Ajuste Fiscal convertido en Ley 53.
“De forma equivocada se ha hecho pensar que este Plan de Ajuste le otorga más dinero a la UPR, pero esto es una falsedad. De concretarse el acuerdo, el gobierno de Puerto Rico no tendría recursos para proteger los servicios, incluyendo la universidad. Se tendría que recortar el presupuesto del gobierno a tal grado que sus servicios quedarían inoperantes.”, aseguró la portavoz del movimiento estudiantil en la UPR Humacao, Alondra Díaz.
Los estudiantes madrugaron para colocar pancartas en diferentes puentes de la región Este: Caguas, Gurabo, San Lorenzo, Juncos y Las Piedras.
De acuerdo con el portavoz del PIP, y también estudiante de la UPR, Ricardo Quiles “la Universidad de Puerto Rico es un patrimonio que le brinda la oportunidad a los puertorriqueños para que puedan estudiar sin realizar grandes inversiones. Esta oportunidad de estudio brinda oportunidades a las personas de todas las edades. Una persona puede educarse con el objetivo de tener oportunidades en el ámbito laboral, recibir un conocimiento técnico que no sería posible adquirir sin guías básicas e instructores, pero también, tener una educación social y humanista que promueva el respeto a los demás y la convivencia social”.
Los jóvenes dijeron en declaraciones escritas que la paralización de labores y la huelga indefinida de la UPR, es una oportunidad para que los docentes, no docentes y estudiantes pongan una pausa a su cotidianidad para discutir el futuro de la universidad.
“La alternativa que está ofreciendo el gobierno de turno, la Junta de Control Fiscal y la jueza Taylor Swain es que la universidad no sea prioridad, sino, que se convierta en parte del botín que se llevarán los acreedores. Los reclamos en torno a la universidad son claves y reconocemos que tienen el respaldo de la mayoría del estudiantado: volver a las clases presenciales, promover una reforma universitaria, que se declare a la UPR como un servicio esencial, que el acceso a los campus universitarios no sea limitados y que las administraciones universitarias expongan y mantengan una posición clara en cuanto al efecto de la Ley 53 en la UPR y el país…”
Aseguraron que realizarán las actividades necesarias para que rebatir y presentar propuestas sobre el futuro del país.
Quiles añadió que “la ley 53 es una amenaza al bienestar y al de todas las generaciones. Con el propósito de aprobar esta legislación, se tuvieron que torcer brazos de muchos políticos y a duras penas se aprobó el acuerdo. Esto se hace en contra de la voluntad de los puertorriqueños. Es importante llevar el mensaje de que nadie crea la mentira de que esto se hace por la salud fiscal del gobierno, si no, todo lo contrario, estaremos pagando siempre la deuda a costa de nuestro bienestar, una deuda que no es nuestra”, culminó.