(16 de julio de 2019 – Servicios combinados) – El gobernador Ricardo Rosselló Nevares insistió que no va a renunciar a su cargo.
“Yo voy a continuar en mi trabajo, es una responsabilidad y siento que es una gran responsabilidad es trabajando”, dijo el gobernador en conferencia de prensa.
Mencionó que está en evaluación de todos los jefes de agencia, que incluye la secretaria de Justicia, Wanda Vázquez Garced.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Judd Deere, expresó que “los eventos desafortunados de la semana pasada en Puerto Rico prueban que las preocupaciones del presidente acerca de la mala administración, politización y corrupción han sido válidas. Continuamos comprometidos con la recuperación de Puerto Rico y firmes en proteger a los contribuyentes y sobrevivientes en Puerto Rico de la corrupción política y abuso financiero”.
El presidente del Partido Popular Democrático, Aníbal José Torres, catalogó el martes, de “un libreto” el mensaje ofrecido por el gobernador, Ricardo Rosselló Nevares.
“El mensaje que acaba de ofrecer el gobernador es parte de un libreto para tratar de manejar su crisis a través de relaciones públicas. Todo con el fin de crear la falsa ilusión de que todo está bien, de que el país está en calma, de que lo ocurrido es un incidente aislado. Sin embargo, este mensaje, unido a la insistencia del gobernador de mantenerse en su puesto, no es la respuesta que el país espera”, dijo Torres en declaraciones escritas.
“Pedir perdón no es suficiente, creerle es imposible y mantenerlo en la dirección de nuestro país significa que Puerto Rico vivirá bajo un gobierno que traiciona a su pueblo, que le miente descaradamente, que se burla y que coartará toda oportunidad de lograr el país que todos aspiramos”, dijo Torres.
También, las autoridades exhortaron a los ciudadanos a mantener la prudencia durante las manifestaciones y evitar un incidente mayor con el uso de fuego, ya que, según argumentaron existen líneas de gas soterradas en el Viejo San Juan.
Crisis en gobierno central
La pasada semana agentes federales arrestaron en Washington, D.C. a la exsecretaria del Departamento de Educación (DE), Julia Keleher, quien fue acusada por casos de corrupción. En la isla fueron arrestados la exdirectora de la administración de Seguros de Salud (ASES), Angela Ávila; así como de las hermanas Mayra y Glenda Ponce y el expresidente de la empresa BDO, Fernando Scherrer. El consultor de esa empresa, Alberto Velázquez Piñol se entregó en Connecticut.
Mientras tanto, luego de los arrestos federales se desató una controversia por la divulgación del contenido de una conversación en la aplicación Telegram en la que el gobernador, contratistas de empresas privadas y varios funcionarios de su administración hicieron diversos comentarios antiéticos.